Alvaro Santabárbara

Tras unas semanas de trabajo se realiza un cosido de la fachada con las barras de acero inoxidable trabajando en dos direcciones opuestas. De esta manera se consigue de nuevo la  unidad estructural de la fachada. Se ha hecho un estudio pormenorizado de cada grieta. 

Los carpinteros también están realizando los nuevos canetes con una maestría destacable. Todo el proceso es muy manual y artesanal. El estado de la madera era realmente malo.

 Las nuevas molduras se realizan totalmente a mano.

Hay que destacar que el edificio es de finales del siglo XIX, por lo que hay elementos de madera, ladrillo, tienen mas de 100 años. Es casi el único edificio original del Paseo Independencia por lo que tiene un grado de protección patrimonial alto.

Por ultimo se ha tenido en cuenta los criterios estéticos de Patrimonio para la elección del color de fachada, balcones, etc. Los pintores también están esmerándose mucho ya que estamos realizando muchas pruebas de color.  Se ha observado con luz de mañana, de tarde, directa, indirecta, ya que el color cambia mucho.